domingo, 8 de mayo de 2011

Coca Cola y sus 125 Años.

La bebida mas comercializada, del mundo ya que la podemos encontrar en más de 206 países y que genera más de 35.000 millones de dólares, conmemora sus 125 años de existencia.

Sus ingredientes adictivos continúan siendo una incógnita más de un siglo después. Y es que la bebida que empezó a distribuirse en una pequeña farmacia de Atlanta (EE.UU.) en 1886 como remedio para distintas dolencias y que pronto cambió la farmacia por los bares. Después de muchas décadas desde su nacimiento, prácticamente casi todos los grandes grupos de distribución alimentaria han optado por crear su propia marca blanca de cola. Pero lo cierto es que la mayoría de consumidores prefiere pagar la diferencia y llevarse el original, cuya secreta composición permanece en el SunTrust Bank Building de Atlanta bajo una clave que sólo conocen dos empleados que nunca pueden coincidir en el mismo lugar.
Toda la seguridad es poca para mantener en secreto la fórmula del tónico creado por el farmacéutico John Pemberton. Se trata de un elixir que siempre ha buscado vincularse con la "felicidad" y que se ha ido adaptado a los diferentes tiempos.
Seguramente su creador, John Pemberton, que le vendió la patente a Asa G.Candler poco después de haberla inventado por 20.000 dólares, se esté revolviendo en su tumba por su poca visión comercial. Mientras que Coca-Cola Company, su propietaria actual y hoy la mayor compañía mundial de bebidas, tiene motivos para frotarse las manos por su acertada adquisición. Y no es para menos, ya que mientras la crisis mundial quiebra pequeñas y grandes empresas, Coca-Cola Company aumenta beneficios.
El pasado año la empresa incrementó hasta un 73% su rentabilidad, en torno a 11.809 millones de dólares, y sólo en el primer trimestre de este año ganó 1.900 millones de dólares, con un incremento del 18%.
La buena recepción comercial radique en su publicidad positivista que apuesta por lanzar mensajes optimistas, promocionar una vida activa, saludable y comprometida con el medio ambiente... O quizá se trate de una cuestión de suerte

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